Pokhara, Nepal
Nepal, el techo del mundo, donde se encuentran 8 de los 14 ochomiles que hay en el planeta, incluido el imponente Everest. Además de su accidentada geografía, es un país fascinante, lleno de historia y espiritualidad, donde la vida se rige por leyes muy distintas a las que estamos acostumbrados.
Pokhara es una ciudad situada en el centro del país, a orillas del lago Phewa, un gigantesco espejo donde se reflejan tres de los picos más importantes del Himalaya: El Dhaulagiri, el Annapurna y el Manaslu, los tres por encima de los 8.000 metros. El ambiente de Pokhara es relajado y tranquilo, lo que resulta en una necesidad después de pasar días o semanas haciendo senderismo por la cordillera más imponente del mundo. ¿Y qué hacer en esta tranquila localidad? Además de los evidentes recorridos montañeros, en Pokhara es imprescindible visitar la Pagoda de la Paz Mundial sobre el lago Phewa; volar en parapente y maravillarse con el entorno que rodea a la ciudad y el lago; asistir a una ceremonia budista, donde instrumentos como trompetas y campanas te harán vibrar; y, definitivamente, cruzar el manto de agua en una barca para contemplar al dios hinduista Visnú. ¿Buscas algo más exótico?